Excitando con palabras sucias en el sexo
Existen algunas palabras sucias en el sexo que tienen un poder mágico: son capaces de potenciar nuestra excitación hacia unos niveles increíbles. Ahora bien, no se trata de decir guarradas sin ningún tipo de sentido, más bien se trata de seguir el juego de seducción y lanzarlas en el mejor momento posible.
También se encarga de estimular la principal zona erógena de nuestro cuerpo. ¿Has adivinado ya cuál es? ¡Por supuesto! ¡El cerebro!
Susúrrale al oído: Esta demostrado que el hecho de que nos susurren palabras al oído, al ser esta una zona también muy erógena, juega directamente con nuestra excitación. Es por ello por lo que puedes aprovechar cuando estés haciendo el amor para acercarte a esa zona y decirle alguna guarrada que aumente más su excitación. No hace falta ser demasiado soez… o quizá sí, tú tan solo haz lo que creas que es mejor.
Personalidad: No intentes utilizar un vocabulario demasiado vulgar si es algo que no va contigo porque lo hayas visto en una película pornográfica… más que nada porque no quedará muy natural. Se puede excitar utilizando eufemismos, no hace falta que digas una palabra que realmente no quieras decir.
Algunas frases que puedes utilizar
“Voy a conseguir que llegues al orgasmo como nunca antes te lo han hecho en tu vida”
“Me encantan tus tetas”
“Estoy deseando entrar dentro de ti”
“Vas a gemir de placer como una buena perra”
“¿Cómo quieres que te lo haga hoy?”
“Tus manos son el caramelo que esparciría por todo mi cuerpo”
“Me encanta como me frotas todo el cuerpo”
“Házmelo más duro, nena”
“Dame más fuerte”
“Voy a conseguir que chilles de placer”
“Estoy deseando que me pases la lengua por mi zona especial”
“¿Siempre ha sido tan grande?”